Filmes/debate com Syd Krochmalny na ECO/UFRJ

Auditório da CPM da ECO/UFRJ - Campus da Praia Vermelha - Av. Pasteurs, 250 - Rio de Janeiro - RJ

Colegas e Amig@s, Convidamos para a apresentação dos filmes “The Naked Soul” (falado em inglês, 15 min, 2012) de Syd Krochmalny (foto tirada dessa performance está no convite) e “La Castidad” (2007, 15 min, em espanhol com legendas em inglês de Syd Krochmalny y Roberto Jacoby) às 18:30 no 31 de julho (quarta-feira), no Auditório da CPM da Escola de Comunicação da Universidade Federal do Rio de Janeiro (UFRJ - Campus Praia Vermelha, Av. Pasteurs, 250). Após a apresentação haverá discussão com Syd Krochmalny, artsta, sociólogo que defendeu sua tese de doutorado na Universidade de Buenos Aires intitulada De La Utopía ao Mercado: Los artistas de la postcrisis (Buenos Aires, 2001-2011), professor na Universidade de Buenos Aires, pesquisador com bolsa do CONICET realizando trabalho comparativo entre produção artística recente de Buenos Aires e New York. Termina um livro a partir de sua dissertação de mestrado: Arte y Politica, Eterno Retorno. Metáforas estéticas contemporáneas (Buenos Aires, 1989-2009). É também editor da CIA Magazine (http://revista.ciacentro.org/), organizou vários livros. Seu trabalho como artista e pesquisador explora relações entre arte, biografia, sociedade, política e sexualidade numa zona limítrofe entre militância e pesquisa, entre performance e produção visual, ficção e realidade, com frequência em formato colaborativo. Para mais informações sobre os trabalhos a serem apresentados, favor consultar http://redflag.org.uk/wp/?tag=scotland e http://www.frieze.com/issue/article/live_and_learn/. Abaixo passamos apresentações dos dois trabalhos feita pelo próprio diretor. Esperamos contar com sua presença e agradecemos se puderem divulgar para eventuais interessad@s, Denilson Lopes, Prof. Escola de Comunicação da UFRJ The Naked Soul, 2013, 15’ En el mito griego de las almas desnudas se halla el origen de la justicia democrática. Después de la muerte, con frecuencia, los libres y justos eran castigados, y los impíos y malaventurados redimidos. Zeus evaluó que el problema residía en la ropa. Las manos, la lengua, la boca, los oídos y los ojos se extravían ante la máscara que cubre al alma. Los injustos ocultan lo prohibido con nobles ornamentos. No importa la razón que lleva a Stephen Gough a caminar desnudo por las calles y las rutas de Escocia, sino la consecuencia que ese acto conlleva. A partir de las acciones y repercusiones se construye una constelación transhistórica que ilumina el teatro del presente. El drama y sus actores escenifican un alma desnuda que defiende el derecho a exhibir su cuerpo y la criminalización que ese acto de libertad produce. Detrás de las bambalinas se halla el fundamento imaginario y afectivo de la subjetividad racional consciente y lógica del puritanismo que ejerce una presión radical sobre la modernidad liberal impidiendo el retorno de la fuerza primitiva y la autoderminación del hombre sobre la vida desnuda. La Castidad, 2007 15’ La video instalación “La castidad” es la versión ficcional de un experimento micropolítico real que abarca nuestra entera vida. Exploramos un lazo social básico distinto de la pareja sexual y diferente de la amistad común. En agosto de 2006 iniciamos una práctica relacional infrecuente: por el lapso de un año pusimos todos nuestros recursos en común para convivir, formarnos, colaborar artísticamente y establecer reciprocidad y asistencia en variados aspectos, dentro de un marco de castidad. Por lo general, el arte relacional actúa sobre grupos extensos y suele ser de compromiso breve y parcial. Con frecuencia las obras de tendencia política refieren a un Otro al que se intenta persuadir o modificar. Nosotros nos proponemos como los sujetos y objetos del experimento. Para transformar al mundo transformamos nuestras propias vidas. Nuestra fórmula podría denominarse “comunismo molecular”, pues tiene como horizonte la comunidad de bienes y aptitudes pero también la fraternidad y la igualdad, así como cierta dilución de la división del trabajo (“cazadores por la mañana, pescadores al mediodía, pastores por la tarde y críticos literarios después de cenar” según la hipérbole de Marx). Excelsos pares nos inspiraron: Sócrates y Alcibíades, Gilgamesh y Enkiddu, David y Jonathan, Sancho Panza y Don Quijote, Bouvard y Pecuchet, Gargantúa y Pantagruel, Sherlock Holmes y el Dr. Watson, Komar y Melamid, Deleuze y Guattari y, claro, Laurel y Hardy. En estas amistades ejemplares, la sexualidad fue un trasfondo que tal vez nunca se consumó. Muy por el contrario, hoy prima la convicción universal de que en el ejercicio de la sexualidad reside el secreto de la liberación humana. Foucault previno contra esta creencia hace treinta años. El pacto vincular que asumimos impugna este lugar común. Pero no el afecto, no el cuidado, no la caricia. Esta investigación de las tecnologías de la amistad propone ahora operar sobre distancias, entre Filia y Eros, entre generaciones (cuarenta años nos separan), entre ser y representación, entre un hombre y otro hombre, entre vida virtual (digamos, second life) y vida corpórea. Pero, más allá de estos postulados teóricos, aspiramos a que “La castidad” sea vivida íntimamente, como una conversación de a dos para dos. Como un bucle entre arte y vida